Redecorar la casa puede ser divertido, pero muy complicado también; sin embargo, esta sencilla regla será de gran ayuda para decorar tu casa y que luzca increíble.
La regla de tres
En las matemáticas, una regla de tres es lo más sencillo, pues un número se multiplica por otro y enseguida se divide entre uno más. En el caso específico de la decoración la regla de tres no se trata de dividir o multiplicar colores, tendencias o estilos, sino que se enfoca en tener tres opciones de todo haciendo énfasis en justamente tres: en el color, en los elementos sobresalientes y en los elementos decorativos básicos.
Tres colores
Color neutro + color primario + color llamativo
Busca un color neutro, tu favorito y uno que luzca bien con él, es decir, tres. Pero opta por uno que sea opuesto o bien, que lo complemente. Por ejemplo, un gris claro con un azul se complementan o un crema y un amarillo son opuestos. Ahora bien, termina libremente con uno llamativo como dorado. No es necesario que sea sólo en la pintura o en elementos, sino que puedes mezclar entre el color de la pared, un mueble y un aditamento o decoración, es simple.
Tres elementos sobresalientes
Grande + Mediano + Pequeño
En este caso debes elegir un elemento que quieras que sobresalga como los espejos, jarrones, cojines y hasta plantas. Sea lo que sea que elijas, procura que haya tres elementos de lo mismo, pero en tamaños y densidades diferentes y sólo debes colocarlos en diversas alturas o en lugares estratégicos. Por ejemplo, si tienes tres macetas a juego, es correcto colocarlas en conjunto para que se distingan los tamaños y así lograrás armonía visual.
Tres decorativos básicos
Sillón / Silla + Mesa + Estante
Estos son los tres elementos básicos en una habitación, al menos en la sala, habitación y comedor. Debe haber algo en donde sentarse, un espacio para colocar algo encima y un espacio para organizar. Entonces, es importante colocarlos de forma armónica para que los tamaños se complementen y no se opaquen entre sí. Los tres muebles pueden ser del mismo estilo o mezclar algunos entre sí, siempre y cuando tengan un punto de unión.
Como último consejo, puedes mezclar todo: tres colores, tres elementos sobresalientes y tres decorativos básicos, pero debes tener en cuenta cada uno de ellos y ser bastante minucioso para mezclar de forma correcta y crear tu regla de tres éxitos.
