Una guía para seleccionar la piedra adecuada según su resistencia, textura y aplicación en el diseño arquitectónico.
Los revestimientos de piedra han sido una constante en la arquitectura debido a su durabilidad y estética atemporal. Sin embargo, elegir el tipo adecuado depende de factores clave como el uso del espacio, la exposición a la humedad y el mantenimiento necesario.
El mármol, por ejemplo, aporta sofisticación en interiores, pero requiere sellado constante para evitar manchas. El granito, por su parte, es altamente resistente y una excelente opción para exteriores debido a su capacidad de soportar cambios climáticos.
En fachadas y muros decorativos, la pizarra es una elección popular por su textura irregular y su paleta de colores naturales. Mientras tanto, la arenisca, con su porosidad característica, funciona mejor en climas secos donde su mantenimiento es más sencillo.
Elegir la piedra correcta no solo garantiza longevidad, sino que también aporta carácter y personalidad a los espacios arquitectónicos, integrando el diseño con la funcionalidad.
