Ese gran olvidado en decoración, estrecho, sin luz… Préstale un poco de atención y verás cómo puedes sacarle partido al espacio y hacer que gane en estilo.
¿Largo y estrecho? ¿Sin luz ni gracia? El pasillo parece considerado un espacio “de segunda” en cualquier casa, una zona de paso a la que no se le presta mucha atención, decorativamente hablando. Pero, con unos sencillos gestos, puede ganar muchos puntos. Valora si en el tuyo cabe un mueble poco profundo, como un zapatero o una repisa para colocar cuadros, por ejemplo, y también es el lugar perfecto para colocar una consola. Del mismo modo, si no te lanzas a colocar papel pintado o pintar de algún color intenso en cualquier otra habitación de la casa, el pasillo es el lugar apropiado para estos experimentos: ganará en personalidad y carácter. También se presta a jugar con los complementos, piden cuadros –perfectos los pequeños en series, colocados en composiciones con gracia–, las alfombras –largas pasilleras o varias redondas más pequeñas, por ejemplo–, apliques, molduras… Mira estas ideas para que entren ganas de quedarse en el pasillo
Fuente: Elle Decor
